Último adiós a la Prima Ballerina Assoluta, Alicia Alonso, en la necrópolis de Colón. Foto: Abel Padrón Padilla/Cubadebate.
El carro fúnebre iba despacio por los estrechos pasillos del Cementerio de Colón. Atrás, como celosos guardianes, caminaban sus alumnos, caminaba el pueblo de Cuba. Los aplausos retumbaban la necrópolis, los “¡Bravo Alicia!” salían fuertes, desde los corazones en los que Prima Ballerina Assoluta caló.
Dicen que ella bailaba y la piel se erizaba, justo así fue su despedida. El sentimiento de la partida, el dolor de la familia y el saber que su impronta está más viva que nunca. “Giselle” cerró los ojos, el cisne abrió las alas y voló.
Cientos se acercaron al panteón que desde hoy la acoge. Allí descansan sus padres, la familia que tanto amó, la unión que llega más allá de la muerte.
“¡Bravo Alicia!” Cerró con broche de oro tu última función. El público te despide, de pie y con aplausos. (Leer más en http://www.cubadebate.cu/especiales/2019/10/19/adios-a-la-reina-bravo-alicia/#.Xaz9Gn-UW00